Los europarlamentarios proponen que los países de la UE puedan expedir visados humanitarios en sus embajadas en el exterior y estiman que así se reducirían drásticamente las muertes de inmigrantes.
La UE propone crear ‘visados humanitarios’ para los demandantes de asilo
El Parlamento Europeo ha solicitado la creación de visados humanitarios, como un novedoso instrumento legal para limitar la pérdida de miles de vidas de inmigrantes irregulares en su tránsito hacia Europa.
La finalidad del sistema es que los que deseen solicitar asilo en un país europeo puedan realizarlo en su embajada o consulado en el exterior. De esta manera, se evitarían viajar sin permiso hacia el país que esperan que les acoja y sin tener que atravesar rutas peligrosas en manos de las mafias de tráfico de personas.

La cuestión se encuentra ahora en manos de la Comisión Europea. El apoyo de los eurodiputados a esta iniciativa legislativa ha sido de 429 votos a favor, 194 en contra y 41 abstenciones. Se pide al Ejecutivo comunitario que plantee una respuesta antes del próximo 31 de marzo para presentar una propuesta sobre este tipo de visados.
La aplicación de esta medida permitiría «a un solicitante de asilo sirio interesado en lograr un estatuto de refugiado en Alemania, viajar legalmente hasta el país germano, donde se resolvería su demanda a favor o en contra, ahorrándose así las penalidades de un trayecto largo e inseguro».
En el contexto de la crisis migratoria se comenzaron a pedir visados humanitarios debido al elevado número de fallecidos en el mar Mediterráneo y, aunque esta cifra ha descendido, la cuestión problemática en sí misma se ha cronificado.
Desde principios del 2000 se han perdido las vidas de más de 30.000 inmigrantes tratando de alcanzar territorio comunitario. Por esa razón, los eurodiputados lamentan que la UE no cuente con un marco legal armonizado sobre el derecho a solicitar asilo, pues depende de la voluntad de los Estados miembros y de la habilidad de los demandantes.
Sobre el 90% de los refugiados reconocidos en la Unión llegaron a Europa de manera irregular.
El Tribunal de Justicia de la UE se ha sumado a la controversia, cuando llegó a sentenciar el año pasado que los países comunitarios no tienen obligación de conceder ese tipo de documento, incluso habiendo riesgo de tortura. Esta sentencia resultó como respuesta a la solicitud de visados por parte de una familia de Siria, a la que Bélgica se opuso con rotundidad.
Los visados humanitarios despiertan suspicacias en el seno de la Unión Europea, especialmente en un momento en que la inmigración se ha vuelto en un asunto susceptible de cambiar el panorama electoral y político.
La propuesta ha sido criticada por el anterior ministro belga de inmigración, por considerar que era «una forma de ampliar las fronteras europeas hasta sus embajadas y consulados en el extranjero, lo que la convertiría en más porosas para la entrada de inmigrantes».
En otros países en el seno de la UE donde gobiernan partidos antiinmigración también se ha mostrado el desacuerdo respecto al pacto migratorio de la ONU que se acaba de suscribir en Marrakech, pese a su carácter no vinculante.
Fuente: El País
