En España hay cerca de 800.000, de los que el 90% son mujeres.
La diputada del Partido Popular por Madrid y antigua Viceconsejera de Empleo y Mujer de la Comunidad de Madrid, Carmen Álvarez-Arenas, ha defendido en el Congreso de los Diputados que los trabajadores del servicio doméstico puedan tener desempleo, tengan una relación contractual transparente con sus empleadores -con derechos y obligaciones claras para los dos- y que se regulen las incapacidades laborales transitorias, así como el tiempo parcial.
Álvarez-Arenas criticó la alta tasa de irregularidad del sector que lleva a que prácticamente dos de cada tres empleadas no tengan un contrato laboral.
Recordó, además, el incumplimiento de la promesa del Gobierno de Zapatero de regular el sector antes de 2008.
Estamos a finales de 2010 y el Gobierno del PSOE no ha cumplido con las obligaciones derivadas de los acuerdos alcanzados al respecto en 2006 y 2003.
Ha incumplido también su programa electoral en el que prometía incluir las trabajadoras del servicio doméstico en el régimen general de la Seguridad Social.
La portavoz del PSOE en el debate habló de incluir el servicio doméstico «en un régimen especial dentro del marco general de la Seguridad Social», contradiciendo la promesa electorale de Zapatero. También apeló a la ética de los empleadores «a la hora de contratar».